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Estudios bíblicos cristianos: Cómo determinar si Cristo de los últimos días es Dios encarnado
El Señor Jesús dijo: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida [...]” (Juan 14:6).
Ayer aprendimos a través de la exploración que Dios se hará carne como el Hijo del hombre para llevar a cabo Su obra cuando regrese. Si el regreso del Señor es la encarnación, y Su apariencia exterior es la imagen de una persona normal, ¿cómo podemos determinar si Él es Dios encarnado? Leamos lo que dice la Palabra de Dios.
Dios dice: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida [...]” (Juan 14:6).
“El significado de la encarnación es que Dios aparece en la carne y Él viene a obrar en medio del hombre de Su creación bajo una imagen de carne. Por tanto, para que Dios se encarne, primero debe ser carne, una carne con una humanidad normal; esto, como mínimo, es el requisito previo más básico. De hecho, la implicación de la encarnación de Dios es que Él vive y obra en la carne; Dios se hace carne en Su misma esencia, se hace hombre”.
“Aquel que es la encarnación de Dios tendrá Su esencia, y Aquel que es la encarnación de Dios tendrá Su expresión. Haciéndose carne, Dios traerá la obra que debe hacer, y haciéndose carne expresará lo que Él es; será, asimismo, capaz de traer la verdad al hombre, de concederle la vida, y de mostrarle el camino. La carne que no contiene la esencia de Dios seguramente no es el Dios encarnado; de esto no hay duda. Para investigar si es la carne encarnada de Dios, el hombre debe determinarlo a partir del carácter que Él expresa y de las palabras que Él habla. Es decir, si es o no la carne encarnada de Dios, y si es o no el camino verdadero, debe discernirse a partir de Su esencia. Y así, para determinar si es o no la carne de Dios encarnado, la clave está en prestar atención a Su esencia (Su obra, Sus palabras, Su carácter, y mucho más), en lugar de fijarse en Su apariencia exterior”.
De la palabra de Dios, podemos ver que Dios encarnado es el Espíritu de Dios hecho carne, convertido, tras adoptar la carne, en una persona normal que aparece y obra en medio de la humanidad. En pocas palabras, es el Espíritu de Dios en la carne convertido en una persona. Por fuera parece una persona normal y corriente, nada altiva ni extraordinaria, y que come, se viste, vive y viaja exactamente igual que una persona normal. Sus relaciones con la gente son muy prácticas, vive en medio de la humanidad. El ojo humano no ve que Cristo tiene la esencia divina del Espíritu de Dios; la gente únicamente ve que Cristo puede expresar la verdad y desvelar misterios en cualquier momento y lugar. Puede hablar a la humanidad y expresar el carácter justo, la omnipotencia y la sabiduría de Dios. Cristo puede llevar a cabo la obra de redención y salvación de la humanidad y Sus palabras la pueden guiar a toda ella. Al final, la obra y las palabras de Cristo pueden alcanzar todas las cosas. Por tanto, Su obra y Sus palabras son cosas que ningún ser humano puede poseer ni alcanzar. Cristo expresa la verdad y realiza la obra de Dios a partir de una humanidad normal. La gente no ve sino a una persona normal que habla y hace cosas. Eso es muy práctico, muy real. Sin embargo, a partir de Su obra y Sus palabras podemos determinar que este Hijo del hombre normal y corriente es Dios en la carne, Cristo. Es igual que el Señor Jesús encarnado: parecía una persona normal, pero podía expresar la verdad en cualquier momento y lugar para proveer y pastorear a la gente, para resolver sus dificultades prácticas. El Señor Jesús le otorgó a la gente el camino del arrepentimiento, fue capaz de realizar la obra de redención y de perdonar los pecados del hombre. Las verdades que expresó y la obra que llevó a cabo revelaron plenamente la autoridad y el poder de Dios y mostraron Su carácter amable y misericordioso. Así pues, vemos que el Señor Jesús era Dios en la carne, Cristo. A fin de determinar si alguien es Dios en la carne, si es Cristo, lo más importante es buscar e investigar Su obra y Sus palabras. Si puede expresar la verdad y el carácter de Dios y realizar la obra de Dios, entonces es Dios en la carne, es Cristo.
Las escrituras tomadas de LA BIBLIA DE LAS AMERICAS® (LBLA) Copyright © 1986, 1995, 1997 por The Lockman Foundation usado con permiso. www.LBLA.com.
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