martes, 16 de julio de 2019

Película evangelio | "La honestidad no tiene precio" Dios bendice a los que son honestos



Película evangelio | "La honestidad no tiene precio" Dios bendice a los que son honestos

La mayoría de las personas en la sociedad actual viven bajo la regla de la supervivencia del "dinero primero", renunciando a la base de ser un hombre por el bien de la ganancia y usar el engaño para ganarse la vida, perdiendo la conciencia. Aunque disfruta de una vida material de alta calidad, ha perdido la verdadera felicidad y siente profundamente el vacío del alma, la acusación y el descontento de la conciencia. ¿Cómo puede obtener la verdadera alegría y paz? ¿Cómo decidir entre intereses monetarios y personas honestas? ¿Cómo puede vivir una vida valiosa y significativa? La película cristiana "La honestidad no tiene precio" te lleva a encontrar la paz de la conciencia y a sentir la felicidad y la liberación de ser honesto. ¡Prepárate para lo que estás a punto de ver!

Zhen Cheng era el dueño de un taller de reparación de electrodomésticos. Era amable, honesto y llevaba su negocio siguiendo las reglas. Nunca trataba de engañar a nadie, pero apenas ganaba lo suficiente para mantener a su familia. Pasado un tiempo, un miembro de su familia y un colega le instaron a practicar las reglas no escritas del negocio, y Zhen Cheng comenzó a creer en dichos que representan una filosofía satánica, tales como:"El dinero no es omnipotente, pero sin él no se puede hacer absolutamente nada". "Los valientes mueren satisfechos; los tímidos mueren de hambre".y "El dinero es lo primero".Zhen Cheng perdió la buena conciencia que le había guiado hasta entonces y empezó a usar métodos maliciosos para ganar más dinero. Aunque ganaba más que antes y su nivel de vida había mejorado, Zhen Cheng, sin embargo, se sentía infeliz y le asolaba un sentimiento de vacío; su existencia era hueca y estaba cargada de sufrimiento.
Cuando Zhen Cheng aceptó la obra de Dios Todopoderoso de los últimos días, llegó a entender a través de la palabra de Dios que a Dios le gusta la gente honesta y desprecia a los que engañan. Zhen Cheng también llegó a entender que ser una persona honesta es la única manera de comportarse como una auténtica persona y la única manera de alcanzar la alabanza de Dios, y por eso prometió ser un hombre honesto. Sin embargo, se demostró que ser un hombre honesto en el mundo real era difícil; con los hermanos y hermanas de la iglesia podía ser tan directo como debía; pero si lo era en el mundo de los negocios, ¿podría ganar dinero? A la larga no sólo ganaría menos dinero, además podría experimentar significativas pérdidas y arriesgarse a quedarse sin su negocio... Ante tales dificultades, ¿podría Zhen Cheng llevar su negocio con honestidad? ¿Qué tipo de giros inesperados ocurrirán en el proceso? ¿Cuál será su mayor recompensa?

Fuente: Evangelio de la Fuente de la Vida

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